Ingredientes
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225 gramos de MantequillaMantequilla sin sal a temperatura ambiente
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420 gramos de HarinaMuy importante que no sea harina de fuerza
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120 gramos de Azúcar glass150 gramos en la receta original
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1 Huevo
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1 cucharadita de Esencia de vainilla
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Media cucharadita de Sal
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Para decorar con glasa
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Azúcar glass
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Aquafaba
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Limón
Descripción
La receta de galletas de mantequilla es una de esas básicas, de las que siempre funcionan y que nos dan mucho juego en la cocina. Podemos prepararlas de muchas formas distintas, decoradas con glasa, con chocolate, teñirlas de colores o sin nada, que también están de muerte.
Estas galletas tienen un sabor ligero a mantequilla y vainilla y no son demasiado dulces. Una vez horneadas, aguantan 2 o 3 meses sin problema en un recipiente hermético, pero en mi casa es muy complicado que duren más de dos o tres días, cualquier excusa es buena para comerse una galleta.
A mí me gusta mucho prepararlas cuando tengo algún regalito que hacer. Las preparo pequeñitas, a veces decoradas o de colores, y busco un bote de cristal bonito para que luego se pueda reutilizar. Me parece un detalle muy bonito y además es económico.
También vienen muy bien si queréis organizar una actividad con los peques de casa, ya que esta receta de galletas de mantequilla es ideal para hacer galletas decoradas.
Para decorarlas podéis usar glasa, chocolate o rotuladores comestibles (¡ojo siempre a que sean de tinta comestible!).
El decorar con glasa siempre requiere algo más de experiencia y paciencia, pero con los rotuladores es súper fácil. Según los rotuladores que compréis, puede que les cueste un poco pintar directamente sobre la galleta, debido a la grasa de la mantequilla. Para esos casos, una solución muy simple, es bañarlas primero en una capita de glasa y dejarlas secar bien. Una vez que la glasa está seca los rotuladores pintan súper bien.
Yo uso los rotuladores de la marca Silikomart. En la siguiente foto de galletas decoradas especial Halloween, podéis ver la diferencia al usar glasa o pintar directamente sobre la galleta.
Si decidís usar glasa, hay que tener mucho cuidado con la salmonella ya que la glasa tradicional lleva claras de huevo crudas, y se usa sin cocinar. Para evitar problemas, podemos usar claras de huevo pasteurizadas o, como en mi caso, aquafaba, que no es otra cosa que el agua de los garbanzos de bote. ¿Garbanzos y galletas? Sí, tranquilos, que no cunda el pánico. La cantidad que se usa en relación al azúcar es mínima, por lo que no tendremos ningún problema de sabor, os lo aseguro.
Si no queréis decorarlas también podemos teñir la masa para hacer galletitas de colores, o dejarlas sin nada.
Yo las suelo preparar con el robot de cocina y le doy un último amasado a mano, pero se pueden preparar a mano sin problema.
La cantidad de galletas dependerá del tamaño y del grosor que queráis, pero salen bastantes. Con las cantidades de la receta os pueden salir unas 25 grandes (como las grandes de la foto, aproximadamente 6cm x 6cm o 6cm x 9cm) más unas 50 o 60 pequeñitas (como las redondas pequeñitas de la foto de unos 3 o 4 cm de diámetro).
Tengo que decir que la receta no es original mía. La encontré hace tiempo por internet, y después de probar varias me quedé con esta del blog Mensaje en una galleta, de la que solo modifico la cantidad de azúcar.
Pasos
1
Hecho
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Preparar la masaLo primero es sacar la mantequilla de la nevera y dejarla a temperatura ambiente unas horas hasta que esté bien blandita. No vale meter la mantequilla en el microondas para calentarla porque la textura que conseguiremos no es la misma. Una vez que la mantequilla esté blanda la batiremos hasta conseguir una especie de crema. Mezclaremos todo bien hasta que veamos que nos queda una masa homogénea sin grumos. Sacamos la masa del robot y amasamos un poco a mano. La textura es un poco pegajosa pero manejable y compacta. |
2
Hecho
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Enfriar la masaPara poder manejar bien la masa y que las galletas no se deformen en el horno, es muy importante enfriar la masa. Una vez la masa esté lista, la dividimos en 3 o 4 porciones y las aplanamos un poco con el rodillo. Yo las suelo dejar un poco más gorditas que el espesor que luego le quiero dar a mis galletas. También podéis hacer una bola con la masa, envolverla en film y guardarla en la nevera para enfriar, pero en ese caso, el proceso de estirar la masa una vez que está fría es más complicado. Dejamos en el frigo un par de horas mínimo para que la masa esté bien firme. |
3
Hecho
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Cortar galletasCon la masa ya enfriada podemos terminar de crear nuestras galletas. Sacamos una de las placas de masa y el resto las dejamos en la nevera para que mantengan el frío. La estiramos bien con el rodillo y le damos el espesor que queramos para nuestras galletas. Yo suelo dejar unos 5 milímetros. Con la masa bien planita y regular vamos cortando nuestras galletas, y al igual que hemos hecho anteriormente, las colocamos sobre una tabla con papel de horno para enfriar otro ratito antes de meter en el horno. Esto evitará que las galletas se deformen en el horno y pierdan la forma que le hayamos dado. Si la forma os da igual y estáis impacientes por tener vuestras galletas siempre podéis saltar este último enfriado. Repetimos el mismo proceso con todas las placas de masa que tenemos. |
4
Hecho
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HornearPrecalentamos el horno a 180 grados centígrados. Cuando esté a buena temperatura sacamos las galletas del frigorífico, y las colocamos en una bandeja de horno con papel para hornear. Las pondremos en la parte media del horno con calor arriba y abajo, durante, aproximadamente 10 minutos. |
5
Hecho
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Decoración (opcional)Si queréis decorarlas, hay que dejarlas que enfríen bien primero. Para decorar con chocolate simplemente tendremos que derretir el chocolate al baño María y podremos bañarlas en él o dejar caer unos finos hilos de chocolate sobre las galletas. Para preparar la glasa con aquafaba no tengo las medidas exactas, siempre lo voy haciendo a ojo según el tipo de decoración que quiera. La textura de la glasa dependerá de cómo queráis decorar. Hay que tener en cuenta que si es muy espesa nos costará extenderla y si por el contrario es muy líquida se desparramará por la galleta. Si lo que queréis es una glasa blanca para poder pintarla con rotuladores, buscaremos una textura semiespesa. Si queréis una decoración más elaborada con glasa, necesitaréis manga pastelera y una boquilla fina para poder hacer los dibujos sobre la galleta. |